Perros y bebés: Todo lo que necesitas saber para una convivencia feliz

Muchas personas creen que no es bueno que un perro conviva con un bebé, temiendo por eventuales agresiones o incluso por transmisión de enfermedades por causas higiénicas. Existen numerosos casos en los cuales lamentablemente las personas deciden deshacerse de su perro cuando ocurre que un bebé llega a su hogar debido a todos estos prejuicios, o tal vez simplemente a ignorancia.

Ya que nada más lejos de la realidad que todos eso temores, porque tanto los perros como los bebés son seres muy puros y llenos de amor, que teniendo las consideraciones pertinentes y siguiendo algunos simples pero fundamentales consejos, pueden convivir de maravilla, ser grandes amigos e incluso beneficiarse mutuamente.

niño con un golden retriever

Niño con su perro golden retriever -> Foto cedida por https://www.razasdeperros.com/las-mejores-razas-de-perros-para-convivir-con-ninos/

Las 9 ventajas de que un bebé crezca junto a un perro

  • En primer lugar, los perros son seres sumamente fieles y leales, al criarse junto a un niño ellos lo adoptaran como un miembro de la manada y lo protegerán como tal. Por ende nuestro perro se convertirá en el guardián personal de nuestro bebé, y podemos estar seguros de que lo protegerá y nos alertara de cualquier tipo de peligro.
  • Los bebés necesitan el juego como parte importantísima de su desarrollo tanto físico como cognitivo, y que mejor compañero de juegos que un perro?. Los perros son juguetones por naturaleza y contribuirán de esta manera al desarrollo y diversión del pequeño. Ambos podrán ser grandes compañeros de aventuras y travesuras.
  • Varios estudios realizados por científicos han demostrado que la exposición temprana de los niños a los perros incrementa sus defensas ya que se fortalece su sistema inmunológico. Por este motivo el bebé crecerá más sano y con menor riesgo de contraer alergias u otras enfermedades.
  • A medida que el niño va creciendo, convivir con un perro puede enseñarle acerca de las responsabilidades y cuidados, ocupándose y colaborando con los paseos, la alimentación, y el aseo del perro.
  • El perro al tener un “hermano” humano será más sociable y aprenderá a relacionarse mejor con su entorno y con todas las personas.
  • Al igual que el perro, el bebé también es beneficiado de esta convivencia en su proceso de socialización y aprenderá a no temer pero si respetar a los perros y demás animales.
  • Al ser la expectativa de vida del perro en años mucho menor que la nuestra, el niño aprenderá acerca del paso del tiempo y las etapas de la vida.
  • El perro contara con más atención y afecto en el hogar, ya que más tarde será el bebé quien compartirá con él muchas más horas de juego y de amor.
  • Al convivir con un animal el niño crecerá con una mayor conexión, empatía y respeto hacia la naturaleza. Además aprenderá de su hermano canino valores como la fidelidad, la lealtad y el amor incondicional.

tres niños pequeños con un perro chihuahua

¿Como presento el bebé recién llegado a mi perro adulto?

La llegada de un bebé al seno familiar es un evento muy importante y que nos llena de alegría pero que a la vez provoca grandes e inevitables cambios en muchas áreas de nuestras vidas. Es un evento que nos exige reordenarnos y adaptarnos a muchas situaciones a las cuales antes no nos habíamos visto expuestos.

Tal como nosotros debemos adaptarnos a los nuevos ritmos, hábitos y cuestiones pertinentes a la llegada del bebé, también debe hacerlo nuestro compañero canino.

Puede que tu bebé llegue al hogar al mismo tiempo que tu perro siendo un cachorro. Pero también puede que ya tu perro sea adulto cuando el bebé llegue a la casa.

Para esto último tenemos que tener en cuenta ciertos consejos y recomendaciones para llevar a cabo la presentación de manera óptima, evitando situaciones de tensión o de celos, que puedan provocar una situación no deseada:

  • Antes de la llegada de un bebé los padres han de dedicar mucho tiempo en preparar su habitación, con su cuna, sus ropitas, sus muebles, sus colores. Es sumamente importante incluir al perro en este proyecto: permitirle ingresar a la habitación, ver las pertenencias del futuro bebé, acostumbrarse a los olores etc. Jamás excluirlo o regañarlo por estar en ese espacio, el perro necesita sentirse integrado.
  • Una vez que el bebé haya nacido, es muy importante que un miembro de la familia le traiga de la clínica u hospital alguna ropita o manta con los olores del pequeño a modo de “pre-presentación”. Como sabemos los perros tienen un sentido del olfato sumamente desarrollado, por lo cual si hacemos esto, cuando nuestro bebé llegue a la casa no será un desconocido para nuestro perro.
  • Ya de por si como parte de la misma convivencia debemos educar a nuestro perro comunicándonos de manera correcta con él y enseñándole a través del refuerzo positivo y no desde el castigo para que nos obedezca. En esta situación puntual esto será muy útil, debido a que debe aprender a saludar y recibir a nuestro pequeño de manera suave y sin saltos o movimientos bruscos. Debe entender que al recién llegado debe recibirlo y tratarlo con delicadeza.
  • Como mencionamos anteriormente, la llegada de un bebé al hogar provoca nuevos tiempos, nuevos ritmos y nuevas rutinas. En lo posible debemos procurar cambiar lo menos posible las rutinas y hábitos de nuestro perro. Ya es un cambio suficientemente grande la inclusión de un nuevo miembro a la familia, como para someter a nuestro amigo aun a mayor estrés.
  • Cuando el perro se comporte de manera correcta y amable en presencia de nuestro bebé debemos reforzar dicha conducta con un premio que puede ir desde un cariño, una palabra alentadora o una pequeña golosina. Recordemos que los perros aprenden por asociación positiva.
  • Un tip que puede ser importante y sumar a la adaptación es la de reproducir algún audio o video con llanto de bebé para contribuir a acostumbrar al perro a los nuevos sonidos que ha de escuchar en nuestro hogar.
  • En algunos casos, y especialmente si se trata de un perro que anteriormente no se ha relacionado con bebés y niños, puede ser de mucha utilidad contratar a un adiestrador calificado para darnos su ayuda profesional durante el embarazo con el proceso de adaptación del perro y con su aprendizaje de ciertos comandos como sentarse, no saltar bruscamente, soltar en caso de tomar alguna pertenencia o juguete del bebé que este en el suelo entre otras cosas.

 

Es muy importante añadir a todos los consejos anteriores controlar nuestra propia ansiedad y nerviosismo principalmente durante el primer encuentro y la adaptación de nuestro perro al bebé. Debemos entender que ese momento tiene que ser lo más relajado y libre de tensión posible, y si nuestro estado de ánimo es de ansiedad, miedo o nerviosismo se lo transmitiremos a nuestro perro provocando que la situación sea tensa. Así mismo también debemos evitar movimientos o reacciones bruscas de nuestra parte cuando el perro intente acercarse a conocer u olfatear al nuevo miembro de la familia. Debemos lograr ante todo que el perro asocie al bebé con momentos alegres, agradables y relajados.

Con la prudencia y responsabilidad ante todo lograremos atravesar con éxito y armonía este proceso.

 

Una vez juntos

Una vez que haya pasado el tiempo de adaptación, es importante que además del perro el bebé también aprenda ciertas cuestiones de convivir con un animal.

El bebé cuando comienza a crecer, dar sus primeros pasos, interactuar con su entorno y explorarlo,  puede tener comportamientos que incomoden al perro e incluso provoquen una reacción no deseada.

Por eso es sumamente importante que el bebé entienda que un perro también ha de ser respetado. Debe aprender a no molestarlo en los momentos durante los cuales el perro está alimentándose o descansando. El bebé necesita aprender a darle cariño a su amigo de manera delicada y respetuosa, sabiendo que hay ciertas zonas donde a los perros no les agrada ser acariciados, e incluso el bebé debe saber medir la fuerza con la que lo toca, para evitar de esta manera jalones de orejas, pelo o cola.

Otro aspecto de gran importancia es que el bebé debe aprender a reconocer y respetar las señales corporales de su cuerpo, ya que los perros demuestran sus emociones y estado de ánimo a través de su lenguaje corporal.

 

Nuestra responsabilidad

Ya hablamos de lo que deben entender los perros y los bebés, de lo que cada uno tiene que aprender y respetar de su amigo, y analizamos todo lo que debemos tener en consideración de cara a la llegada de un bebé al hogar siendo ya el perro un miembro de la familia.

Aunque también existe la posibilidad de que el primero en llegar sea el bebé y basados en las ventajas de su convivencia y su compañía, decidamos incorporar un cachorro a la familia.

Esto puede ser una gran idea ya que no hay nada mejor que tanto bebé como cachorro crezcan juntos y compartan sus etapas de crecimiento y su despertar de la curiosidad por explorar el mundo. De esta manera el vínculo será muy sólido y productivo para ellos.

Pero debemos ser sumamente responsables en la decisión y adopción del perro como nuevo miembro de la familia. Es fundamental que entendamos que el perro es un ser vivo que necesita de cuidados y amor al igual que el bebé, y que no será un juguete para el niño sino un compañero de vida.

Además antes de tomar la decisión hemos de considerar todos los aspectos y responsabilidades que implica el hecho de tener un perro en la familia: visitas periódicas al veterinario, gastos de alimentación, paseos diarios, ocuparnos de su cuidado en caso de irnos de viaje sin poder llevarlo etc.

 

Con toda esta información brindada ya sabes cuales son los principales puntos a tener en cuenta para lograr una armoniosa convivencia entre perros y bebés, y también cuales son las ventajas y beneficios que trae para ambos esta gran combinación.

Luego solo resta disfrutar de los tiernos y divertidos momentos que nos regalara esta hermosa dupla a lo largo del tiempo.

 

Bibliografía y enlaces de interés: